Dietas bajas en grasa ¿son la mejor opción?
Seguramente habrás escuchado que las dietas bajas en grasas son las mejores aunque lo cierto es que consumir grasas saludables en tu dieta te brindará beneficios a tu salud.
Las grasas son tan indispensables para nuestro cuerpo y no consumirlas podría causar consecuencias como: piel reseca y quebradiza, cabello opaco y dolor de articulaciones. Además de aumentar tu apetito, te sentirías deprimido, confuso y aturdido.
Lo ideal no es dejar de consumir grasas o implementar una dieta baja en grasas ya que son importantes para el organismo. Debemos consumir grasas buenas y dejar de consumir las que son dañinas para tu salud.
¿Qué beneficios tienen las grasas buenas para la salud?
La función de las “grasas buenas” para el organismo son diversas, entre ellas:
- Ayuda a nuestro cuerpo a producir hormonas
- Mantiene la piel y el cabello sano
- Regula la presión arterial
- Mejora el funcionamiento cerebral
- Reduce los niveles de colesterol malo
- Reduce los riesgos de enfermedades cardiácas
¿Cuáles son las grasas malas?
Las grasas saturadas y trans son a las que llamamos “grasas malas” y las puedes encontrar en: la mantequilla, embutidos, leche entera y derivados, quesos grasos, carnes, manteca.
¿Cuáles son las grasas buenas?
Llamamos “grasas buenas” a las que son insaturadas las cuales te ayudaran a cuidar tu corazón y las puedes encontrar en: el aceite de oliva, nabina, aceite de soja, aceite de girasol, en frutos como el aguacate (también en presentación de aceite), pescados como salmón, sardinas, atún y algunos frutos secos.
¿Debo de ponerle aceite a mi comida?
El aceite es un elemento que se ha vuelvo indispensable en la mayoría de los alimentos que consumimos, dejar de usarlos no es algo forzoso, aquí lo importante es aprender a observar el punto de humeo de tu aceite que es cuando se ha vuelvo malo para tu salud.
El punto de humeo de un aceite es cuando se ha sometido al calor por un tiempo determinado y este comienza a humear y cambiar de color ¿te suena familiar?
Alguna vez a todos nos ha pasado ver esta reacción cuando nos encontramos cocinando. Lo que no sabemos es que cuando esto sucede es porque el aceite se ha vuelto nocivo para nosotros y ha comenzado a liberar sustancias cancerígenas al aire afectando también a los alimentos que estamos cocinando.
¿Qué sería lo más conveniente? Utilizar aceites no refinados como el de olivo y linaza en los cuáles tienen un punto de humeo con mejor propensión a su oxidación, es decir, tardan un poco más en reaccionar ante la temperatura y por tanto un proceso más lento para oxidarse; tienen un mejor sabor, aroma atractivo, color profundo y contenido de nutrientes más elevados.
Si cocinas con aceites refinados como el aceite de canola, oleico, girasol o de cacahuate, puedes seguir haciéndolo, sólo asegúrate de someterlo al calor por muy poco tiempo para evitar que humeen y deséchalos una vez utilizados.
Ahora que ya sabes la importancia de las grasas buenas para el organismo, no es necesario que hagas dietas bajas en grasa sino elegir o sustituir por grasas buenas ¿lo intentamos?
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